El presidente de AEBIG, Luis Puchades, destacó que las plantas de biometano son proyectos tanto energéticos como agroindustriales, ya que, además de generar energía, permiten obtener fertilizantes que pueden ser utilizados por la agricultura local. Esto cobra especial relevancia en un momento en el que, como recordó, las lluvias ya no son como antes. Asimismo, subrayó que Castilla y León es la región española con mayor potencial para desarrollar proyectos relacionados con esta energía.

Puchades realizó estas declaraciones durante su intervención en la mesa redonda ‘El potencial del biometano como fuente de energía: la mejor alternativa al gas natural’, organizada por el periódico El Norte de Castilla y la Junta de Castilla y León.

El presidente de la Asociación Española de Biogás explicó el proceso mediante el cual los subproductos del campo se convierten en energía. Este procedimiento comienza cuando los residuos agrícolas se introducen en plantas especializadas, donde se almacenan en sistemas cerrados herméticamente, de los que no salen ni aire ni olores. En ese momento, las bacterias anaerobias son aprovechadas para producir el biogás, compuesto fundamentalmente por metano y CO2, luego este gas es purificado mediante un upgrading, generando biometano que se inyecta a la red de gas, y el subproducto digerido en el que se aprovechan los nutrientes que tenían los residuos para convertirse en fertilizantes orgánicos. “Se trata de una tecnología que tiene muchas ventajas, en la que valorizamos los subproductos de estas dos maneras”, afirmó Luis Puchades.

En este  evento también intervinieron Javier Díaz (presidente de AVEBIOM), Alberto Pascual (CEO de Kerbest), José Manuel Jiménez (director general de Infraestructuras y Sostenibilidad Ambiental de la Junta de Castilla y León y consejero delegado de SOMACYL S.A.) y Juan-Carlos Suárez Quiñones (consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León).